Jefe del Pentágono en Chile y el Comando Sur de Estados Unidos
Nueva Agenda, Santiago
de Chile.- La visita de dos días a Chile del secretario de Defensa de
Estados Unidos, Leon Panetta, no pasó inadvertida para sectores
sociales, a pesar de su discreto tratamiento en la prensa local.
“Chile es un socio estupendo”, escribió Panetta en su cuenta en
Twiteer antes de aterrizar en el austral país, donde fue recibido por el
presidente Sebastián Piñera en el Palacio de La Moneda.
“Felicito al pueblo de Chile y su gobierno, ya que son una
inspiración para Estados Unidos y el mundo”, diría luego tras reunirse
con su homólogo chileno, Andrés Allamand, quien realzó por su parte la
“muy profunda, antigua y fructífiera relación bilateral”.
“No sólo compartimos valores muy importantes, como son el respeto a
la democracia, a la justicia social y a los derechos de las personas,
también tenemos una visión común sobre la necesidad de avanzar hacia un
mundo en paz, con buena gobernabilidad y con economías abiertas y
competitivas”, afirmó Allamand.
Aunque el gobierno de la derecha en Chile es uno de los más fuertes
aliados de Washington en una región cada vez más indócil a sus intereses
de dominación, generó recelo adicional en el ámbito doméstico la
coincidencia de la visita con la recién instalada base militar en el
Fuerte Aguayo, de la Armada.
El recinto, financiado por el Comando Sur de Estados Unidos, fue
inaugurado el 5 de abril en la comuna de Concón, región de Valparaíso,
unos 120 kilómetros al noroeste de esta capital.
Sin poder descartar el tema, Allamand y Panetta negaron que sea una
base estadounidense. Recalcaron que se trata de “un campo de
entrenamiento operado total y absolutamente por Chile” para preparar a
militares en “operaciones de paz”.
El exdirector de la Agencia Central de Inteligencia afirmó que el
propósito de su visita iba dirigido a fortalecer la cooperación con
otros países para enfrentar el narcotráfico, el crimen organizado y el
terrorismo.
En relación con la base militar reconoció que Washington “está
brindando apoyo a esto, pero es absolutamente un esfuerzo realizado por
Chile”, aseveró.
Allamand en tanto señaló que el aporte financiero estadounidense ha
estado dirigido únicamente a mejorar las instalaciones de entrenamiento.
La presentación de la base de Concón como un centro únicamente de
entrenamientos de los “cascos azules” de la ONU sigue siendo vista con
ojeriza por grupos defensores de los derechos humanos.
Bien sabemos que el que paga, manda, apuntó el reconocido jurista
Eduardo Contreras, para quien el enclave militar forma parte de la
política intervencionista de Estados Unidos en la región.
Vistas las construcciones en Concón, el tipo de cuerpos represivos
nacionales a los que adiestran y las simulaciones que practican, no hay
lugar a dudas. Es la preparación de la guerra contra el pueblo en que el
enemigo es todo ciudadano que reclame sus derechos, advirtió.
Lo que se pretende es trasladar al sur del continente una reedición
de la Escuela de las Américas de la exZona del Canal de Panamá, opinó.
Representantes de organizaciones defensoras de los derechos humanos
calificaron de intromisión estadounidense la instalación de una base
militar financiada por el Comando Sur.
“No permitiremos que este fuerte se convierta en el primer intento de
Estados Unidos de instalar bases militares en nuestro país, como lo ha
hecho en Honduras, Colombia y otros países, aunque vengan con la fachada
de Naciones Unidas”, agregó la presidenta de la Agrupación de
Familiares de Ejecutados Políticos, Alicia Lira.
Una declaración de grupos defensores de los derechos humanos que se
manifestaron la víspera frente al Fuerte Aguayo anotó al respecto que
Estados Unidos no tiene calidad moral para enseñar “operaciones de paz”
cuando ha promovido golpes de Estado, financiado operaciones de
desestabilización a países hermanos, y promovido la guerra en el mundo.
No olvidamos ni perdonamos, apuntó el comunicado, a los que financiaron, armaron, prepararon, a los asesinos de nuestro pueblo.
Diarios del sur del hemisferio llamaron asimismo la atención sobre
otro hecho muy poco publicitado, pero también coincidente con la
presencia de Panetta en Chile: la realización en Santiago, desde hoy y
hasta el 11 de mayo, de la tercera fase del ejercicio PKO-A 2012
(Peacekeeping Operations-Americas) coordinado por el Comando del Sur del
Ejército norteamericano.
La CIA, los militares y la democracia.
ResponderEliminar(colaboracionismo)
colaborar con el negocio de bienes raíces y/o el negocio de la salud para que uno de mis familiares consiga trabajo en un país desarrollado (Italia, EEUU, etc)
El ideal liberal requiere reducir al mínimo el papel del Estado en los asuntos económicos (es una farsa).
El liberalismo no es otra cosa que el control de los militares, en los países en vías de desarrollo como Egipto.
Lo peor para a un país en desarrollo es el contrabando, que es promovido por los países vecinos; los republicanos lo llaman sus aliados ejem. Israel en el medio oriente y en América Latina es obvio.
Los políticos.................. la nueva nobleza.
Las administraciones.... los nuevos señoríos.
El ciudadano.................. el nuevo súbdito.