viernes, 13 de septiembre de 2013

Brasil y Argentina buscan coordinar acciones contra espionaje cibernético

Brasil pretende coordinar con Argentina acciones contra espionaje cibernético

El espionaje en Internet preocupa actualmente a ambos países, a raíz de los documentos filtrados por el ex contratista de la NSA, Edward Snowden.

por DPA -
El gobierno brasileño pretende coordinar con Argentina acciones para combatir el espionaje cibernético, afirmó el ministro de Defensa de Brasil, Celso Amorim, en declaraciones que reproduce la agencia oficial de noticias brasileña ABR. 
"Queremos tener una acción coordinada, conjunta con Argentina", dijo Amorim en Buenos Aires, donde hoy se reunirá con su par argentino, Agustín Rossi, y con el canciller de ese país, Hector Timerman, con quienes discutirá el asunto. 
El espionaje en la red preocupa actualmente a Brasil y Argentina, a raíz de las denuncias hechas por el periodista del diario británico The Guardian, Glenn Greenwald, en base a documentos filtrados por el ex contratista de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Edward Snowden. 
En el caso de Brasil, las denuncias indican que el gobierno norteamericano espió las comunicaciones de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, y de sus principales asesores; las computadoras del ente estatal Petrobras, que prepara para el mes que viene la mayor subasta petrolera de la historia; y correos electrónicos y llamadas telefónicas de miles de brasileños o extranjeros de paso por Brasil, durante una década. 
En Argentina, según denunció Timerman en la última cumbre presidencial del Mercosur, realizada en julio pasado en Uruguay, al menos un centenar de ciudadanos, empresas y políticos fueron víctimas de espionaje por parte de Estados Unidos. 
Al respecto, Amorim sostuvo que la defensa cibernética "es el área más importante de defensa del siglo XXI", y reconoció que su país "recién está dando los primeros pasos" en el tema. 
Además de Argentina y Brasil, ciudadanos de Colombia, Uruguay y Venezuela también fueron objeto de espionaje, según reveló el fin de semana pasado la revista brasileña Istoé. De acuerdo con la publicación, el espionaje "en tiempo real" se realiza desde un centro de inteligencia localizado en la isla Ascensión, en el océano Atlántico, a unos 2.500 kilómetros de Recife, capital provincial del estado brasileño de Pernambuco.

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